miércoles, 26 de octubre de 2011

Deforestacion vegetal


Las amenazas al bosque
La deforestación
Arboles cortados en el bosque pluvial
En todo el mundo, los árboles gigantes del bosque pluvial están amenazados no solamente
por el corte directo sino también por los incendios, la contaminación y otros factores.
Durante miles de años, los humanos han estado jugando un papel cada vez más importante en la deforestación. A través de la historia, un imperio tras otro han cortado bosques para construir sus barcos y viviendas, y como combustible. Una vez que han sido devastados, esos bosques no se han recuperado en mil años o más, y algunos nunca se recuperarán -- como en partes del Mediterráneo, el Medio Oriente y Gran Bretaña.
La deforestación global se ha acelerado dramáticamente en décadas recientes. Los bosques tropicales de América del Sur y del Sudeste de Asia están siendo cortados y quemados a una tasa alarmante para usos agrícolas, tanto en pequeña como en gran escala, desde enormes plantaciones de palmera aceitera (Elaeis guineensis - Arecaceae) hasta la agricultura de susistencia de "tumba y quema". Los fuegos que se inician para estos propósitos frecuentemente arden fuera de control. La llamada "Bruma" en el Sudeste de Asia durante 1997 y otros años fue el resultado de extensos incendios forestales que ardían sin control en los bosques afectados por la sequía.
La idea de deforestación crea imágenes de áreas desnudas. Por esto, cuando alguien ve una fotografía de áreas "altamente deforestadas" en partes de los trópicos, ellas se sorprenden al ver que todavía quedan muchos árboles ahí. De hecho, no parecen estar deforestadas. La razón de ello es que por lo menos el 10 por ciento del terreno es cubierto por las copas de los árboles; si el porcentaje de bosque cae por debajo del 10 por ciento, las áreas tropicales son consideradas deforestadas.
Pero que existan algunos árboles no significa que el bosque no haya sufrido daños. Cualquier reducción del bosque es un problema para su ecosistema. La deforestación ocurre cuando los bosques son convertidos en granjas para alimentos o cultivos comerciales o usadas para criar ganado. También la tala de árboles para uso comercial o para combustible lleva a la destrucción de los bosques.
Expansión de la ciudad y de los campos de cultivo
Los suburbios han crecido a expensas de los bosques, y ahora los árboles están confinados
a pequeños parches entre los campos de cultivo, los caminos y las edificaciones.
La deforestación no tiene que ver solamente con la pérdida de árboles. También tiene un gran impacto sobre el ambiente. Muchas criaturas vivientes dependen de los árboles por lo que, cuando desaparecen los árboles, igualmente desaparecen los animales (biodiversidad disminuida). Se pierde medicinas y materiales potencialmente valiosas, lo mismo que el agua y el aire limpios. Sufren las personas indígenas y, eventualmente, también las economías nacionales. El futuro de las personas y de los bosques están interconectados.
Los árboles también almacenan agua y luego la liberan hacia la atmósfera (este proceso se llama transpiración). Este ciclo del agua es parte importante del ecosistema debido a que muchas plantas y animales dependen del agua que los árboles ayudan a almacenar. Cuando se cortan los árboles, nada puede retener el agua, lo que conduce a un clima más seco. La pérdida de árboles también causa erosión debido a que no hay raíces que retengan el suelo, y las partículas de suelo entonces son arrastradas hacia los lagos y ríos, matando los animales en el agua.

La tala excesiva
Una de las causas principales de la deforestación es la tala excesiva ("sobrecorte"). Casi en todos los lugares donde se cortan árboles, hay casos donde demasiados son cortados al mismo tiempo, lo que hace casi imposible la restauración del bosque a su estado natural.
Si desea leer más, vaya a Tala excesiva

La deforestación lleva a un incremento del dióxido de carbono (CO2) en el aire debido a que los árboles vivos almacenan dicho compuesto químico en sus fibras, pero cuando son cortados, el carbono es liberado de nuevo hacia la atmósfera. El CO2 es uno de los principales gases "invernadero", por lo que el corte de árboles contribuye al peligro del cambio climático.
Las zonas ribereñas (= hábitats que rodean los ríos, lagunas y otros cuerpos de agua) son especialmente sensibles a los efectos de la deforestación. Los caminos y las áreas limpias interceptan o desvían el flujo natural del agua, y pueden provocar inundaciones, deslizamientos de tierra y solvatación. Esto conduce a una pérdida en la calidad de agua y una pérdida de hábitat para los peces y de áreas de reproducción.
Muchas ciudades han sido construidas alrededor de ríos, destruyendo la cubierta forestal alrededor de estas fuentes de agua.
Parcela deforestada
Vista aérea de una porción de terreno recién cortado,
en Guatemala.
Desgraciadamente, muchos países en desarrollo en las regiones tropicales están tratando de mejorar sus economías a través del uso inadecuado de sus bosques. Brasil ha inundado miles de kilómetros cuadrados de bosque amazónicos con la construcción de represas hidroeléctricas, y se planifican más.
Grandes poblaciones de personas muy pobres y bosques tropicales generan conflictos. Un agricultor de susistencia no puede preocuparse por el ambiente. Pero también las naciones industrializadas destruyen grandes trechos de bosque para ganancias económicas a corto plazo.
Quizás la mayor causa potencial de deforestación se encuentre en el futuro: el cambio climático. Si el efecto invernadero eleva la temperatura del planeta, los bosques no podrán seguir sobreviviendo en sus localidades presentes. Algunos tendrán que subir las laderas montañosas o migrar hacia ambientes más frescos o más húmedos. Pero, a diferencia de las condiciones que siguieron a la última Edad de Hielo, el calentamiento global probablemente suceda demasiado rápidamente para que los bosques puedan adaptarse.

jueves, 13 de octubre de 2011

Niveles troficos de la depredacion animal



Pertenecen a este grupo las bacterias y los hongos. Estos organismos descomponen los cadáveres y provocan la desintegración de las partículas orgánicas. Las bacterias se hallan ampliamente distribuidas en el medio acuático y en el terrestre, mientras los hongos son escasos en el medio marino, pero abundan en el terrestre. Estos organismos son seres saprofíticos porque se alimentan de sustancias en descomposición.
En condiciones normales y, sobre todo, a temperatura óptima, aceleran la desintegración de los organismos muertos y desdoblan las sustancias complejas a compuestos más simples, que son utilizados nuevamente por otros seres vivos. Los organismos descomponedores mineralizan, por decirlo, así, la materia orgánica, liberando  químicos como producto de la descomposición que realizan mediante enzimas.
Los materiales que se producen por efecto de la descomposición son utilizados por los organismos vivos productores, con 1o cual se produce elreciclaje de la materia.
Los desintegradores cumplen con un  muy importante en el reciclaje de los elementos, utilizando la materia orgánica muerta para transformarla en sustancias, que serán aprovechadas nuevamente por los organismos productores, con 1o cual se inicia nuevamente el ciclo de la materia en laNaturaleza.
Cadenas alimentarias y tramas.
Hemos visto a lo largo de este tema, que en todo sistema ecológico se produce una transformación de energía o alimentos que pasa de unos organismos a otros. La relación alimentaria que existe entre los diversos organismos que integran la Naturaleza se denomina cadena alimentaria.
Una cadena alimentaria está constituida por una relación de varios organismos a través de los cuales fluye la energía acumulada en forma de . Así una de las cadenas más sencillas que conocemos es la relación que se establece entre el pasto, la vaca y el hombre, y que podemos representar así:
PASTO ( VACA ( 
El sentido de las flechas indica la dirección en que fluye la energía. En realidad, en la Naturaleza las cadenas no son tan sencillas y presentan derivaciones colaterales que las hacen muy complejas.
Cada integrante que forma parte de la cadena ocupa un nivel trófico y constituye un eslabón de ella. Dos animales pertenecen al mismo nivel trófico cuando están separados de los productores por el mismo número de niveles.
Se entiende por nivel trófico, el lugar que ocupa un  vivo en la cadena alimentaria. En un ecosistema acuático, la cadena alimentaria se inicia con el fitoplancton (algas microscópicas), del que se alimentan los peces pequeños, y estos a su vez son devorados por otros más grandes.
Finalmente, el hombre puede utilizar cualquiera de los peces pertenecientes a los niveles tróficos mencionados para su alimentación. En la transferencia de energía de un nivel a otro se pierde mucha energía, tanto más cuanto más larga sea la cadena. En esto ocurre 1o mismo que en una redcomercial de un producto, cuantos más intermediarios haya, más se encarece el artículo para el consumidor.
Se calcula que sólo un 10 por 100 de la energía disponible es utilizada por el nivel trófico inmediato. Dicho en otros términos, si tenemos 1.000 kilos de fitoplancton solamente son aprovechados por el zooplancton 100 kilos, y si tenemos disponibles 1.000 kilos de pasto, solamente 100 kilos aproximadamente aprovechará la vaca.
Un venado, por ejemplo necesita, determinada área mínima de pasto para poder subsistir si el espacio se reduce por el aumento de individuos hastalímites extremos, la población se regula automáticamente, bien sea por la muerte de algunos venados que fallecen de hambre, o bien por la emigración de algunos hacia otros  en busca de alimentos.
El hombre, cuando cultiva una parcela o cría ganado, tiende a simplificar las cadenas alimentarias para sacar el máximo rendimiento a sus cultivos o a la cría de ganado y aves de  para evitar las pérdidas que ocurren de un nivel a otro en la Naturaleza, donde las cadenas alimentarias normalmente son mas largas y complicadas, constituyendo verdaderas tramas por las interrelaciones que se establecen entre los diferentes niveles tróficos.
Pirámides ecológicas.
Monografias.com
La relación que existe entre los seres vivos que forman parte de una cadena de alimentos puede representarse gráficamente en forma de pirámide alimentaria.
En esta representación gráfica, la  de la pirámide alimentaria está formada por los productores y a continuación se ubican los consumidores de acuerdo al nivel que ocupan, hasta cerrar el vértice con el último nivel.
  • a) La pirámide de números: toma en cuenta el número de individuos presentes en cada nivel. Como lo normal es que el número de productores sea mayor, se ubica en la base y luego se presentan los otros niveles, cuyo número va disminuyendo a medida que se sube el nivel. Por eso estas representaciones tienen forma de pirámide.
Monografias.com
  • b) La pirámide de biomasa: toma en cuenta la biomasa de cada nivel trófico, es decir, la masa biológica existente. Lo normal es que la biomasa de cada nivel vaya descendiendo a partir de la base hasta llegar al último nivel, donde es menor.
Monografias.com
  • c) La pirámide de energía: representa las pirámides alimentarias tomando en cuenta la energía disponible en cada nivel. Es la más exacta de las representaciones y refleja mejor 1o que realmente ocurre en la naturaleza.
Monografias.com
Ciclo de la materia
De los 106 elementos que existen en la Naturaleza sólo algunos son esenciales en cantidades apreciables para la vida. Entre ellos tenemos los siguientes:carbonooxigeno, nitrógeno, hidrógeno, calcio, fósforo, potasio, cloro, etc.
Algunos otros se requieren en pequeñas cantidades (trazas), tales como el cobre, cobalto, zinc. Los animales satisfacen estas necesidades aprovechando la materia orgánica producida por las plantas y absorbiendo oxígeno y agua, del ambiente. Muchos de 1os elementos requeridos para la vida se hallan en la superficie de la Tierra en pequeñas cantidades.
Se calcula que la vida se originó hace alrededor de tres mil millones de años. Si durante este tiempo los elementos inorgánicos hubiesen sido extraídos del ambiente por los seres vivos, y no devueltos al medio mediante el reciclaje, ya muchos de e11os se hubieran agotado. Esto no ha ocurrido, por cuanto, los seres vivos devuelven tales elementos esenciales al medio. La vida continúa gracias a la utilización y reciclaje de los nutrientes inorgánicos que presentan un ciclo de transformación constante y sin solución de continuidad.
Esta sabia lección de la naturaleza debe ser aprovechada por el hombre para evitar el agotamiento de los recursos naturales, aplicando procesos para reciclar los materiales que utiliza para su provecho. Como la naturaleza, el hombre debe aplicar el primer principio de la termodinámica, que dice «la energía no se crea ni se destruye, solo se transforma».

Relaciones interespecíficas en las comunidades

Relaciones interespecíficas entre 1os seres vivos.
Las distintas especies de organismos que viven en determinada área forman parte de la misma comunidad y ecosistema y, por 1o tanto, se afectan mutuamente de diversas maneras. Los herbívoros dependen de las plantas verdes para obtener glúcidos y proteínas. Los carnívoros obtienen dichas sustancias de 1os herbívoros.
Todos 1os organismos, a su vez, dependen de los descomponedores que eliminan del ambiente cadáveres y excreciones, que de otro modo, en corto tiempo, harían la vida imposible. Orugas, anélidos, miriápodos y otros animales subterráneos, viven en el suelo y cambian sus características, determinando el número y tipos de plantas que pueden crecer en él.
Las plantas altas proyectan su sombra sobre los organismos que viven bajo ellas, y cambian el tipo de vientos y la humedad a que aquellos están expuestos.
Las plantas proporcionan a los animales protección y lugares para anidar. Y, así, se podría continuar con esta lista de interacciones. Lo importante es hacer destacar que una comunidad no es simplemente un conjunto de diferentes especies que, casualmente, son capaces de vivir bajo las condiciones de un lugar, sino un sistema integrado por especies que se interrelacionan entre sí.
Para el estudio de las interrelaciones entre las diversas especies consideraremos las siguientes categorías:
  • a. Simbiosis, es la asociación entre dos especies por la que, una o las dos participantes, se benefician mutuamente. Comprende a su vez el comensalismo y el mutualismo.
  • b. EI antagonismo, es la relación en que al menos una de las dos especies resulta perjudicada. Comprende: el parasitismo, 1a depredación, 1acompetencia y la antibiosis.
Simbiosis
El término es utilizado con diferentes acepciones en el lenguaje biológico. Algunos autores la aplican sólo en caso en que dos especies vivan juntas con beneficio mutuo. Otros lo aplican no sólo en casos en que ambas especies se benefician, sino también cuando sólo una especie se beneficia, mientras que la otra no sufre daño. Aquí usaremos el término con el sentido más amplio.
Etimológicamente, simbiosis significa sencillamente «vivir juntos». Este es el significado que se le dio a la palabra cuando se introdujo por primera vez en Bióloga, y ese es el significado que le daremos, reconociendo, no obstante, dos categorías de simbiosis. La primera, el comensalismo, que se aplica a una relación en la cual una especie se beneficia, mientras que la otra no sufre daño, ni recibe beneficio. La segunda, el mutualismo, en el cual ambas especies se benefician
La interrelación de comensalismo se establece entre dos individuos en la que uno se beneficia y el otro no se perjudica ni se beneficia.
Refugio, soporte, transporte, alimento, son algunas de las ventajas que una especie comensal obtiene de su asociación con la especie huésped. Por ejemplo, en los bosques tropicales, muchas pequeñas plantas, las epífitas, crecen en las ramas u horquetas de los grandes árboles.
Estos comensales, entre los que se encuentran muchas especies de orquídeas y bromeliáceas, no son parasitas ya que usan los árboles como soporte, sin extraer alimentos de ellos. Aparentemente no dañan a su huésped excepto cuando se agrupan en tal cantidad que dificultan su crecimiento o provocan roturas en las ramas. Un tipo similar de comensalismo es el uso que los pájaros hacen de los árboles para nidificar.
Es difícil, a veces, descubrir el beneficio que surge de una relación de comensalismo. Por ejemplo, ciertas especies de lapas sólo prosperan fijadas al lomo de una ballena, mientras que otras, sólo se desarrollan sobre lapas que a su vez se fijan a las ballenas. No está claro cuál es la ventaja que estosgrupos de moluscos aprovechan, excepto que evidentemente encuentran bases de apoyo poco ocupadas y un medio de transporte que aumenta su dispersión. Pero, es difícil ver cómo estos beneficios han llegado a ser suficientes para provocar el desarrollo evolutivo y la especialización.
En otros casos de comensalismo el beneficio es muy evidente. Algunas especies de peces, por ejemplo, viven normalmente en asociación con las anemonas de mar, obteniendo de ellas protección y refugio, y, a veces, robándoles parte de su alimento. Estos peces nadan libremente entre los tentáculos de las anémonas, a pesar de que otros peces son paralizados rápidamente cuando tocan estos tentáculos.
Las anemonas se alimentan de peces pero estos que viven en comensalismo con ellas, a veces, llegan a entrar en la cavidad gastrovascular sin sufrir ningún daño aparente. Las adaptaciones fisiológicas y de comportamiento que hacen posible esta relación de comensalismo deben ser realmente importantes.
Otro ejemplo curioso, es el de un pequeño pez tropical (Fieraster) que habita en el recto de una especie de pepino de mar. El pez sale periódicamente para alimentarse y luego vuelve a su extraña guarida hurgando primero el orificio rectal del huésped con el hocico y luego dando vueltas rápidamente para entrar en retroceso.
Otro ejemplo es el de un pequeño cangrejo que vive en la cavidad del manto de las ostras. El cangrejo entra allí en estado larval y puede llegar a crecer tanto, que la apertura entre las valvas de las ostras resulta demasiado estrecha para que pueda escapar. Queda así convertido en un protegido prisionero. Toma una parte del alimento de la ostra, pero, aparentemente, no le causa ningún daño.
El Mutualismo:
El mutualismo es una interrelación simbiótica entre dos especies en la cual ambas se benefician. Son muchos los ejemplos de relaciones simbióticas que benefician a ambas especies. Por ejemplo, la relación entre una planta y los insectos que intervienen en su polinización es evidentemente mutualística.
El caso clásico más conocido es el del liquen, el cual está constituido por un alga y un hongo. El hongo proporciona al alga las sustancias minerales que obtiene del sustrato y conserva la humedad; por su parte, el alga le proporciona al hongo los hidratos de carbono que, sintetiza mediante el proceso de la fotosíntesis. Estas relaciones son tan íntimas que prácticamente no pueden vivir separados el alga y el hongo.
Otro caso conocido de mutualismo de vegetales lo tenemos en la asociación de bacterias nitrificantes del genero Rhizobium con las raíces de algunas plantas leguminosas como caraotas, arvejas, etc. En este tipo de relación, las bacterias fijan el nitrógeno libre del aire que es utilizado por la leguminosa, que lo almacena en los nódulos de sus raíces y que utiliza para su metabolismo. A cambio de este beneficio, las bacterias obtienen hidratos de carbono y otras sustancias cedidas por las leguminosas.
Otro caso es el de las bacterias que vive en el tubo digestivo de los rumiantes donde desdoblan la celulosa; así estos animales pueden asimilar este compuesto, mientras que las bacterias se benefician por los alimentos que consiguen en el tubo digestivo de ]os rumiantes.
Una de las más conocidas y que quizá hayamos contemplado con nuestros propios ojos, es el caso de las anemonas de mar, que viven fijas sobre la concha de un caracol, que a la vez está ocupada por un cangrejo ermitaño o ladrón.
En este caso, la anemona (celenterado) tiene transporte para trasladarse de un lugar a otro y se aprovecha de los restos de animales que caza el crustáceo. La anemona por su parte le sirve como camuflaje al crustáceo y además lo defiende de sus enemigos con unas células urticantes denominadas matocistos.
Parasitismo
El parasitismo es una interrelación entre una especie que obtiene el alimento a expensas de otra (una o más) causándole daños considerables.
Algunos autores engloban en este concepto la depredación, ya que es la utilización inmediata de la presa muerta por el victimario; sin embargo, el parasitismo consiste en la explotación gradual y continua que puede producir graves daños incluso la muerte del huésped.
Los parásitos pueden ser externos o ectoparásitos e internos o endoparásitos. Los primeros viven sobre la superficie del huésped, chupando su sangre. Los parásitos internos o endoparásitos pueden vivir en los espacios de los diversos conductos del cuerpo o pueden introducirse en masas de tejidoscomo los músculos o el hígado, sangre, intestino, pulmón y otras partes. En otros casos como los virus y algunas bacterias y protozoos, viven dentro dela célula del huésped.
  • Parasitismo entre vegetal y vegetal
Muchos hongos y bacterias parasitan a otros vegetales causándoles daños. Uno de los casos más conocidos son las royas y los carbones, que perjudican a muchas plantas gramíneas como el trigo y el maíz, utilizadas por el hombre para su alimentación.
Otro ejemplo de parasitismo 1o constituye el caso de la tina o "guate pajarito", que pertenece a la familia de las lorantáceas, que parasita a ciertosarboles como el samán, aguacate, etc.
  • Parasitismo entre vegetal y animal:
Un caso de parasitismo entre vegetales y animales lo constituyen los hongos y bacterias que parasitan principalmente la piel de los animales. La mayoría de las enfermedades de la piel son de origen fungoso, es decir, enfermedades transmitidas por hongos. Esto, naturalmente, trae graves consecuencias para el hombre.
  • Parasitismo entre animal y animal:
En las relaciones parasitarias entre animales, podemos decir que existen gran cantidad de ejemplos y en algunos casos existen animales que pueden tener varios parásitos simultáneamente. La pulga y el piojo son ectoparásitos del hombre que además de las molestias que le causan pueden transmitirle enfermedades.
La mayoría de las enfermedades parasitarias del hombre son producidas por parásitos animales. Como ejemplos mencionaremos la lombriz intestinal, la anquilostomiasis, la bilharzia, la amibiasis y la enfermedad de Chagas.
La Depredación:
La depredación consiste en que un ser vivo mata a otro para alimentarse de él.
Definiremos a un depredador como un organismo de vida libre que mata y se alimenta de presas.
El depredador suele ser de dimensiones semejantes o mayores con respecto a la presa; el tigre es depredador del venado, el zorro es depredador de conejos, etc. En general, la depredación en la naturaleza representa un mecanismo de equilibrio y control de la población. Sin embargo, el hombre en su afán de enriquecimiento ha introducido en muchos casos una explotación irracional e intensiva, que aparte de agotar los recursos naturales y destruir el equilibrio ecológico, ha puesto en peligro su propia existencia. Esta relación entre plantas no existe.
  • Depredación entre vegetal y animal:
Los animales herbívoros y el hombre se alimentan de vegetales y en este caso podemos decir que actúan como depredadores. Las plantas carnívoras destruyen algunos insectos y otros animales que se les acercan, aprovechando sus restos para su alimentación.
  • Depredación entre animal y animal:
Los ejemplos de depredación entre animales son abundantes en la naturaleza y podemos afirmar que desde los protozoarios hasta el hombre, existen muchos ejemplos de depredación, la cual constituye una base firme para el control de las poblaciones, contribuyendo así a tener el equilibrio de la naturaleza.
Competencia.
Es la lucha que sostienen los animales y las plantas por el espacio o los alimentos.
La competencia se refiere a una cohabitación de la cual derivan desventajas para una o más especies que utilizan la misma fuente alimenticia, la misma disponibilidad de agua, el mismo espacio para la reproducción, etc. cuando espacio, alimentación y agua, están disponibles en condiciones limitadas.
La competencia es un factor importante en el ecosistema, puesto que impone la regulación de las poblaciones para que se mantenga el equilibrio de la naturaleza y controlar en esta forma el desarrollo excesivo de ciertas poblaciones en detrimento de otras.
  • Competencia entre vegetal y vegetal:
Como ejemplo de este tipo de relación entre vegetales tenemos la lucha que se desarrolla en las plantas dentro de una selva o bosque, en la búsqueda deluz, agua, anhídrido carbónico, etc.
Un experimento sencillo se realizó con dos especies de trébol. Se encontró que las dos podían crecer muy bien solas, pero cuando se mezclaban en un terreno, una eliminaba rápidamente a la otra. La razón era simple, la especie prospera mantenía sus hojas ligeramente más altas que las de su competidora y por ello en cuanto los cultivos alcanzaban una densidad suficiente, el competidor quedaba privado de luz por completo.
  • Competencia entre animal y animal:
El biólogo ruso G.F. Gause formuló su principio basándose en una serie de experimentos de laboratorio. Su experimento más sencillo, ahora clásico, consistió en el cultivo en el laboratorio de dos especies de paramecios: Paramecium aurelia y Paramecium caudatum. Cuando las dos especies fueron cultivadas en idénticas condiciones en recipientes separados, el paramecio aurelia creció mucho más rápidamente que el primero, utilizaba el alimento disponible más eficazmente que el segundo. Cuando los dos fueron cultivados juntos, el primero se multiplicó mucho más rápidamente que el segundo, el cual fue pronto eliminado.
Antibiosis.
Una forma muy particular de competencia es la que se realiza excretando al ambiente metabolitos poco dañinos para la especie que los produce, pero muy tóxicos y dañinos o repelentes para otras especies.
Este tipo de interacción, llamado antibiosis, también se ha denominado amensalismo, un ejemplo son las plantas que, cuando se desarrollan sin competidores, toleran intervalos de pH del suelo bastante amplios; mientras que cuando se encuentran en presencia de competidores, inducen en el suelo un pH muy bajo que las otras especies no 1o toleran.
Otras plantas, como la Enelia farinosa, que vive en zonas desérticas donde la competencia por el agua es muy intensa, produce en sus hojas un derivado del benzaldehído que impide el crecimiento de otras especies en sus cercanías. Hay dos especies de cebada cuyas raíces excretan alcaloides que obstaculizan el desarrollo de otras especies.
Otros ejemplos de antibiosis lo tenemos en el eucalipto, el nogal negro americano, (Junglans nigra) y algunas algas como Chlorella vulgaris, que produce un antibiótico contra una diatomea.
Un ejemplo muy importante de antibiosis lo constituye la relación entre hongos y bacterias. Se ha comprobado que los medios donde abundan ciertos hongos, las bacterias no existen o están muy controladas. Esto se debe a ciertas sustancias químicas producidas por los hongos, como el Penicilium, que impiden el desarrollo bacteriano.
Estas observaciones han permitido a la ciencia, hace años, encontrar la aplicación de estas sustancias con fines curativos contra enfermedades cuyo agente productor es una bacteria.
De este modo se han descubierto los antibióticos. El primero de ellos fue la Penicilina que debe su nombre al hongo del cual se extrae (Penicilium notatum) y fue descubierto en 1944 por Alexander Fleming.
En la actualidad se han descubierto numerosos antibióticos que se utilizan exitosamente en la curación de muchas enfermedades infecciosas.

Conclusión

Se llama nivel trófico en ecología a cada uno de los conjuntos de especies, o de organismos, de un ecosistema que coinciden por el turno que ocupan en la circulación de energía y nutrientes, es decir, a los que ocupan un lugar equivalente en la cadena trófica. En este sentido, existen tres niveles tróficos; el primero está ocupado por los productores, organismos capaces de transformar la materia inorgánica en orgánica gracias a la energía de la luz solar o de reacciones de oxidación. En el segundo nivel se sitúan los consumidores primarios o herbívoros, que se alimentan de los vegetales.
El tercer nivel trófico lo integran los carnívoros o consumidores secundarios, los cuales se alimentan a su vez de los herbívoros. En el siguiente nivel están los carnívoros terciarios, que se alimentan de otros carnívoros. Hay otros consumidores, los omnívoros, que ocupan el segundo y tercer nivel.
Por otro lado, las relaciones interespecíficas son las que se establecen entre especies diferentes de una comunidad, por ejemplo dos o más especies animales competir por la misma presa para alimentarse. La relación de competencia por el alimento y el espacio se produce entre individuos de la misma especie o de diferentes especies. Entre estas relaciones se señalan: la simbiosis, el mutualismo, el parasitismo, la depredación, la competencia, la antibiosis.
Estos tipos de relaciones pueden ser positivas, neutrales o negativas.

viernes, 7 de octubre de 2011

Deforestacion marina


La depredación de la vida marina  
y la muerte de los mares
 
El inexorable agotamiento de la vida de los mares en los últimos años y la insaciable avidez depredadora que caracteriza al ser humano -condicionado a consumir alimentos totalmente inadecuados a sus necesidades psíquicas y fisiológicas- son la causa de decenas de conflictos pesqueros internacionales que a veces desembocan en violentos y mortales enfrentamientos -48 pescadores senegaleses han muerto atropellados por barcos arrastreros ilegales extranjeros- protagonizados por una flota mundial sobredimensionada, compuesta de 1,2 millones de embarcaciones cubiertas que surcan los mares y océanos de todo el mundo disputándose y esquilmando los despojos cada vez más escasos de los seres marinos destinados a satisfacer los irracionales hábitos culinarios de quienes -debido a la falsa percepción del pescado como un alimento sano y nutritivo- castigan sus maltratados sentidos con sus caprichos dietéticos.
Un derroche de vida aberrante e irracional
El escándalo de las vacas locas y la preocupación por reducir el consumo de alimentos ricos en colesterol ha acentuado el interés por el consumo de pescado y de carne de pollo, cerdo, etc. Sin embargo, la gente desconoce que tanto los cerdos como los pollos, reciben los mismos restos de matadero sospechosos de producir la temida encefalopatía espongiforme bovina (EEB) que sufren las vacas, además de otras harinas de pescado procedentes de los 30 millones de toneladas de peces que cada año se convierten en harinas, piensos, aceite o fertilizantes utilizados igualmente en la alimentación de especies de acuicultura, en abono de grandes cultivos o, incluso como combustible fósil en centrales térmicas.
Si a la utilización de métodos destructivos no selectivos de pesca y su uso como subproductos para alimentar otros animales, se suman las llamadas capturas  incidentales anuales de peces no deseados o no permitidos que entran en las redes  y las especies de escaso valor o alevines no comerciales que se tiran por la borda -estimados entre 18 y 40 millones de toneladas, o unos 27 millones de toneladas según la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO), sin tener en cuenta los peces heridos que mueren después de escapar de las redes-, el desperdicio anual de vida marina alcanza los 60 millones de toneladas de peces. Para comprender y juzgar la magnitud y las consecuencias de tal derroche de vida y los niveles de depredación y esquilmación humana de los mares, debemos conocer los métodos salvajes que se emplean en las capturas de peces y otros  seres  vivos: tortugas,  delfines, aves marinas, etc., que van desde el uso de barcos dotados con nuevas redes de arrastre cuya boca, del tamaño de 8 campos de fútbol, es capaz de engullir hasta  16 aviones Boeing 747 y redes de decenas de kilómetros (que cubren una superficie marina de más de treinta y dos mil kilómetros, donde caen mortalmente atrapados millones de animales de especies no deseadas), hasta la utilización de explosivos para seleccionar fácilmente los peces con valor comercial, después de dinamitar los arrecifes que les sirven de refugio natural y el empleo de cianuro para aturdirles (causando una gran mortandad) después de romper el coral y acceder a sus escondites.
Más de la tercera parte de los peces capturados no se dedican directamente al consumo humano, transformándose mayormente en harina de pescado o piensos para otros animales, con un coste por kilo muy superior al de otras materias primas vegetales: la producción, por ejemplo, de 1 kilo de pollo alimentado con harina de pescado requiere la captura de 90 kilos de peces que mueren, tras una lenta agonía, a causa del shock, asfixiados, estrujados y aplastados por el peso de otros peces en las redes, congelados vivos en alta mar a 196 grados bajo cero, o enterrados vivos en sal o troceados como las anguilas.
A pesar de ser una práctica insostenible y deficitaria -altamente aberrante y destructiva-, la pesca industrial sólo se mantiene gracias al generoso apoyo institucional.
Los derechos ignorados del mar
Las críticas más habituales que se producen en relación con las decenas de conflictos pesqueros en todo el mundo -por ejemplo, con Marruecos, o la guerra del fletán o del bonito-, provienen del movimiento ecologista y son de naturaleza exclusivamente conservacionista, limitándose únicamente a la condena de las prácticas de sobreexplotación de los "recursos pesqueros" -cada vez más escasos y ricos en productos tóxicos-, considerados paradójicamente esenciales para satisfacer las falsas necesidades biológicas de proteína animal de la humanidad, anteponiendo siempre a los derechos de los peces y la vida del mar unos intereses económicos egoístas -supuestamente de orden divino, que justifican y amparan la pesca y la explotación de cualquier ser vivo con el fin de comercializar y consumir sus cuerpos contaminados en nombre de una tradición culinaria irracional que amenaza seriamente toda la cadena trófica marina mundial.
El mar: despensa y cloaca de la humanidad
El ser humano, no contento con matar peces a gran escala, asfixiándolos violentamente al separarlos de su hábitat natural, destruye también la vida marina y su propia salud con la misma eficacia, aunque más sutilmente, vertiendo toneladas de residuos contaminados al mar -plagado de grandes cantidades de alquitrán, aceite y metales pesados, como mercurio o plomo-, que ingieren los peces de los que posteriormente se alimenta.
El mar Negro -el más contaminado de todo el mundo- se ha convertido en los últimos años en la cloaca de una gran parte de Europa, donde van a parar enormes cantidades de compuestos fosforados, mercurio, DDT, aceite y otros productos tóxicos, responsables de la desaparición de 800.000 delfines -al menos 2.500 mueren cada año atrapados por redes de enmalle a la deriva en aguas de la Unión Europea- y de la pérdida de 21 especies de peces, igual que sucede en el mar del Norte -otra de las extensiones marinas más contaminadas del planeta-, donde también se vierten abundantes residuos químicos industriales, aguas residuales, pesticidas y metales pesados como el DDT, PCB's (bifenilos policlorados), cinc, cobre, cromo, níquel y mercurio.
Aunque los peces capturados en aguas continentales corren un mayor riesgo de estar contaminados, la abundancia de productos químicos afecta igualmente a los peces de alta mar que acumulan en sus tejidos los contaminantes que ingieren durante toda su vida, junto con los otros peces que les sirven de alimento: el pesticida DDT -prohibido en los años setenta- se sigue encontrando en los tejidos de los peces. Los altos niveles de contaminación orgánica (Bifenilos policlorados), metales pesados y las toxinas naturales que contienen los peces no se destruyen al cocinar o congelar el pescado.  Los  crustáceos,  por ejemplo, contienen niveles tóxicos  de plomo, cadmio, arsénico y otros metales pesados que hacen muy arriesgado su consumo, ya que cada año se producen envenenamientos e infecciones parasitarias que afectan a 30 millones de personas.
La Organización Mundial de la Salud (WHO) admite que no existe un nivel seguro de ingestión de mercurio, cuya fuente principal es el pescado. Una típica lata de atún, por ejemplo, contiene 15 microgramos de mercurio. La insalubridad de los mataderos es bien conocida, pero el pescado también se contamina fácilmente durante su manipulación con estafilococos y la bacteria anaerobia Clostridium: el 40% del pescado se empieza a estropear antes de llegar al consumidor: Un estudio realizado en 1987 por el Instituto Holandés para la Investigación de la Pesca, constató que las enfermedades de la piel y los tumores cancerígenos detectados en el 40% de la platija y el lenguado se debían a la contaminación y, en otro estudio, realizado el mismo año en Alemania, se comprobó que el 42% de sus peces capturados estaban enfermos.
Joseph Cummins, un profesor canadiense de genética, ha advertido que incluso las concentraciones "aceptables" de PCB's (bifenilos policlorados) que se acumulan en los tejidos grasos de los peces podrían causar dificultades de aprendizaje y trastornos en el comportamiento de los niños.
En agosto de 1993, el Ministerio de Agricultura y Pesca británico advirtió también sobre los riesgos de consumir anguilas contaminadas con el pesticida dieldrín.
Los niveles de contaminación pueden ser igual de preocupantes en los peces provenientes de piscifactorías: en análisis realizados en 1991, se comprobó que cuatro de cinco muestras de salmón obtenidas en los supermercados contenían residuos de antibióticos y productos químicos potencialmente dañinos.
 
Las subvenciones pesqueras destruyen la biodiversidad del planeta
La práctica de la pesca se ha convertido en una actividad industrial altamente esquilmadora y deficitaria, con pérdidas que la FAO estima en 50.000 millones de dólares anuales. El mar no da más de sí porque no hay peces suficientes para satisfacer el creciente consumo, y el derroche desenfrenado que amenaza toda la biodiversidad del planeta.
El derroche que siempre suele ser deficitario, se hace evidente al ver las cifras del ¿negocio? de la pesca: en todo el mundo se gastan anualmente 124.000 millones de dólares para capturar peces valorados en 70.000 millones de dólares, un déficit difícilmente sostenible que evidencia -además de la necesidad de unas subvenciones generosas- una gran falta de sentido común porque fomenta el despilfarro y la destrucción de la vida marina. La sobrepesca industrial en el mar del Norte causó la muerte el pasado mes de marzo a 50,000 aves marinas que aparecieron muertas de hambre en la costa de las islas Shetland, debido a la esquilmación industrial desenfrenada que -sin tener en cuenta la complejidad de los ecosistemas- roba y destruye la vida y el alimento de otras especies para destinar, por ejemplo, el 50% de los peces capturados a la fabricación de piensos y la producción de velas y betún.
En España, el sector pesquero -con una flota de 19.000 barcos de pesca-  ocupa el primer puesto de la Unión Europea, que aporta actualmente una importante ayuda económica de 180.000 millones de pesetas como parte de las inversiones  previstas hasta el año 1999 de 400.000 millones de pesetas, para renovar la flota -compuesta por un 60% de barcos con más de veinte años de antigüedad- y adaptar la actividad pesquera nacional, en todas las zonas marítimas, a las nuevas exigencias de las pesquerías internacionales. La Administración central también abonó ayudas por valor de casi 13.000 millones de pesetas en 1994.
El agotamiento de las pesquerías causa de conflictos y desequilibrios ambientales
La totalidad de las 17 pesquerías más importantes del mundo han alcanzado o sobrepasan ya sus límites de plena explotación y 13 se encuentran agotadas o seriamente deterioradas, como sucede con las poblaciones de bacalao y arenque. Desde los años setenta, las capturas de bacalao han descendido, de 380.000 toneladas a 60.000 toneladas en la actualidad, y en los últimos cuarenta años la población de arenque se ha reducido a un tercio.
Las presiones de los estados ribereños para conservar y explotar directamente las diferentes especies marinas de las zonas bajo su control afectan muy especialmente a la flota española, ya que las dos terceras partes de sus capturas anuales medias de 1,4 millones de toneladas de peces se obtienen cerca de las costas; en los caladeros exteriores más ricos del planeta, lo cual requiere innumerables acuerdos comunitarios y privados para mantener la actividad de la flota. El enorme desarrollo del sector pesquero industrial provoca conflictos armados y diplomáticos internacionales, y la muerte de millones de seres marinos, a causa de la sobreexplotación de los mares y la alteración de los hábitats y ambientes litorales.
Focas y peces víctimas de la política y la creciente presión depredadora humana
El colapso casi total de las pesquerías del gran banco de Terranova y del Atlántico, donde en los últimos quince años las poblaciones de bacalao, eglefino, platija, mero, atún, etc., se han reducido hasta en un 90%  a causa del empleo abusivo de métodos de pesca destructivos y al exceso de capturas; en particular la sobreexplotación de capelin (un pequeño pez del que se alimenta el bacalao), ha sido la excusa del Gobierno canadiense -que quería contentar a sus pescadores por motivos políticos- para permitir la masacre de 1.500.000 de focas arpa en los próximos años, empezando con la matanza de cerca de cuatrocientas mil focas este año, ignorando deliberadamente los exhaustivos estudios de la Asociación Internacional de Mamíferos Marinos, que demuestran el escaso impacto depredador de estos animales en las poblaciones de bacalao. Las focas se alimentan principalmente de peces que se salen de las redes y su consumo representa menos del 0,002% de las capturas.
El alto consumo de pescado en España -si se compara el consumo estimado de unos cuarenta kilos por habitante y año, con los 22 Kg. de Canadá y los cinco Kg. escasos de los países pobres- ha provocado un fuerte incremento pesquero y una mayor presión depredadora, debido a la mejora de los equipos de navegación, teledetección y medios de pesca utilizados y a los sistemas más eficaces de conservación de los peces capturados, que permiten una mayor actividad y autonomía a la flota en los caladeros, y un nivel superior de capturas, de peces cada vez más jóvenes.
Para mantener el nivel actual de la demanda de pescado -una media mundial de más de 13 kilos por persona y año-, serán necesarios 80 millones de toneladas en el año 2000, y 91 millones de toneladas en el año 2010, frente a los 72,3 millones de toneladas de 1993. La FAO reconoce la pérdida de cerca del setenta por ciento de los caladeros de todo el mundo -que actualmente se encuentran esquilmados, sobreexplotados o al máximo nivel de explotación posible- y considera que el aumento de volumen deberá obtenerse de la acuicultura, con métodos de pesca más selectivos y un mayor control para evitar los descartes (tirar los peces capturados moribundos al mar).
El incremento exponencial de capturas de peces, pasando de apenas 3 millones de toneladas a primeros de siglo a los más de 100 millones en la actualidad, y de las flotas pesqueras de países como Japón, Taiwan, China, Corea o Indonesia, que han tenido un crecimiento en los últimos veinte años tan marcado como el de sus propias poblaciones, y el hecho de que muchos pescadores de países como Marruecos, Chile, Senegal o India pidan la reducción de las flotas extranjeras en sus aguas  -donde faenan los pesqueros españoles-, son claros signos de una grave crisis pesquera y medioambiental que requiere de soluciones ecológicamente responsables y no de parches como la acuicultura, que representa una amenaza adicional a la salud del planeta.
Las piscifactorías y su impacto devastador en la vida marina
La cría intensiva de peces en jaulas, tanques o celdas marinas es una práctica mundial desde hace cientos de años, similar a la cría intensiva de animales terrestres, tanto en los métodos utilizados -restricción de movimientos, alimentación controlada, manipulación-, como en la crueldad y la falta de respeto y consideración hacia los intereses y las necesidades de otros seres vivos, que mueren atrapados y ahogados en las redes que impiden a las focas, aves, delfines, marsopas, etc., el acceso a los peces aprisionados. Los acuicultores acostumbran a disparar a menudo contra las focas, garzas y cuervos marinos -incluso contra animales protegidos como las nutrias-  que se acercan a comerse "sus" peces, y se estima que sólo de este modo mueren 3.000 focas en Escocia cada año.
Lejos de ser la panacea que algunos proponen, la acuicultura -un sistema de explotación intensiva de peces y animales marinos totalmente dependientes y propensos a las enfermedades, causadas por el estrés, las manipulaciones y el confinamiento- es una industria tecnológicamente dependiente, cuyos devastadores efectos sobre el paisaje y la naturaleza, se deben también a la introducción de especies foráneas y agentes patógenos en el medioambiente, y que requiere en todas las fases de explotación -para acelerar el crecimiento de los peces- piensos, fertilizantes y medicinas que alteran la composición química del agua y degradan su calidad.
La eliminación de viejos manglares para la cría del camarón está causando un daño ecológico irreparable en algunas partes del planeta. Los peces, al escapar de sus jaulas, pueden transmitir a los que viven fuera sus enfermedades, y los que han sido manipulados genéticamente pueden también criar con ellos. Un estudio llevado a cabo por el Centro de Investigación de la Pesca de los EEUU, sobre 40 especies de peces ya extintos, descubrió que las especies introducidas contribuyen a eliminar el 68% de las especies nativas.
El hacinamiento y la competencia por los alimentos genera agresiones entre los peces, que se muerden la cola y las aletas, llegando excepcionalmente al canibalismo. Los acuicultores combaten este comportamiento con un sistema de gradación que consiste en privarles de alimento durante 12 horas, para después separarlos según su tamaño. La gradación es muy estresante para los peces, que se desinteresan por la comida, pierden peso, e incluso llegan a morirse.
Las piscifactorías también producen grandes cantidades de residuos. Una tonelada de truchas genera la contaminación equivalente a las aguas residuales sin depurar procedentes de 200 a 500 personas. Aunque los restos orgánicos acumulados (heces y alimentos) no sean tóxicos, éstos pueden dañar la bahía o la zona costera donde estén situadas, debido a la eutroficación que consume todo el oxígeno del agua, y asfixia los peces u otros organismos. La complejidad de la naturaleza es imposible de recrear incluso con la ayuda de la tecnología más sofisticada.
En un estudio irlandés se descubrió que el 94% de las larvas de los piojos marinos -que destruyeron sus pesquerías de truchas- procedían de piscifactorías dedicadas a la cría de salmones. Las tentativas para tratar el problema cor Diclorvos -un pesticida que aparece en la lista roja de sustancias peligrosas del Gobierno- enfureció a los pescadores locales de mariscos, conscientes de que este potente pesticida es mortal para los crustáceos y otras formas de vida marina en concentraciones de tan solo 0,1 partes por millón.
La matanza anual de millones de peces implica nuevos y terribles padecimientos para los seres marinos, al no existir ningún tipo de reglamentación que evite su sufrimiento y regule el trato que reciben. La mayoría no reciben ningún alimento durante uno o dos días antes de morir lentamente asfixiados, después de ser separados violentamente del agua, tras quince minutos de agonía en el hielo. Otros métodos, igualmente crueles, consisten en cortarles las branquias para que mueran desangrados, en golpearles la cabeza, o en la electrocución. Los tanques de aturdimiento llenos de dióxido de carbono -que a veces se utilizan para reducir el dolor- les inmoviliza en un minuto pero, sin embargo, pueden tardar hasta tres o cuatro minutos en perder la sensibilidad.
Las generosas subvenciones públicas incentivan la proliferación de piscifactorías, un negocio que, según un informe de 1992, realizado por Compassion in World Farming (CIWF) derrocha hasta el 90% de los alimentos utilizados. A pesar de lo cual, el aumento sostenido de la acuicultura, a un ritmo de crecimiento de un millón de toneladas de peces al año, elevó la producción de animales marinos, en 1993, a un nivel mundial de capturas de 16 millones de toneladas de peces, cifra que, éticamente, no debe representar la cantidad de un producto, sino el elevado número de vidas, brutalmente sesgadas, de millones de animales marinos.
En España, las explotaciones de acuicultura marina alcanzaron en 1994 casi las 160.000 toneladas: 152.000 toneladas pertenecientes a moluscos y el resto a peces y crustáceos. En la actualidad hay 116 proyectos de acuicultura que cuentan desde 1994 con una subvención europea y nacional conjunta superior a 900 y 250 millones de pesetas, respectivamente, para una inversión prevista de 2.500 millones de pesetas. Galicia -con 99 proyectos de acuicultura- es la comunidad autónoma que más destaca por su alto número de proyectos, que lamentablemente se suman a otras explotaciones intensivas de animales, de la industria peletera local, cuyo negocio se basa igualmente en la explotación cruel e innecesaria de otros seres sensibles.
 
Los seres marinos sienten y sufren
Aunque los peces no expresen el dolor del mismo modo que nosotros, se ha comprobado científicamente que todos los animales vertebrados (incluidos los peces) experimentan sensaciones de dolor ante cualquier estímulo dañino, a través de procesos neurofarmacológicos similares. En 1976, una investigación independiente constituida por la RSPCA (Asociación para la Prevención de la Crueldad con los Animales), encontró pruebas suficientes para comparar el dolor que sienten los peces con el dolor que manifiestan otros animales vertebrados.
Los peces no son meros recursos a explotar, sino seres libres que merecen todo nuestro respeto. Si consideramos que no existe razón alguna para continuar destruyendo la vida de los mares ni para consumir los despojos contaminados de otros seres vivos, que carecen de fibra y tienen un exceso de grasa, debemos rechazar el consumo de pescado y condenar las destructivas prácticas de pesca que hacen peligrar la salud y el equilibrio biológico de todo el planeta.